Aquellos trabajadores que siendo formoseños o teniendo su familia y hogar en Formosa, tienen otro destino laboral, y por cosas de la vida tuvieron que trasladarse a la provincia para asistir a algún familiar enfermo, tienen muchos inconvenientes a la hora de los permisos.
Esto es lo que ocurre en muchos casos, y en uno en particular en el que un efectivo de una fuerza nacional que tiene despliegue en Formosa, vino a la provincia para asistir a un familiar enfermo. Ahora, la jefatura de su fuerza lo está convocando nuevamente a presentarse a su lugar de prestación de servicios, pero surge el temor de esta persona que si se va de la provincia, ya no podrá volver a ingresar, en caso de una urgencia por sus familiares directos.
En muchas provincias, los efectivos federales que tuvieron que trasladarse a sus lugares de origen por cuestiones familiares, debido a las restricciones de la pandemia, tienen la posibilidad de prestar servicios en la provincia donde se encuentran provisoriamente, quedando cerca de su familia.
Pero al parecer, esto no aplica para Formosa, donde pese a ser un efectivo de fuerza nacional, es convocado nuevamente a prestar servicios en otra provincia, sin tener la opción de hacerlo en Formosa, para estar cerca de los familiares.
Claramente, surge necesario que haya una respuesta de sentido común a situaciones como éstas, para que la pandemia no se convierta en un mecanismo de separación de las familias, que más todavía se necesitan en momentos en que hay alguna enfermedad que aflige a uno de sus integrantes.
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